Al navegar (sin poseer una brújula) con el cielo completamente nublado o con la imposibilidad de observar al sol caer… ¿Cómo identificar el norte? ¿Cómo lograr certeza de la dirección asumida? Obviando, otros tipos de instrumentos de ubicación, como la satelital, por ejemplo. La comparación podría ayudar a visualizar, la enorme inversión de tiempo y de recursos que se pueden mal utilizar, solo por tener a la mente lejos del presente.
Sufrir por lo que ha pasado o por lo que no ha acontecido aún, desvía toneladas de energías necesarias para entender, traducir y aprovechar lo que suceda.
En todo caso, es natural y humano perder temporalmente la orientación. Sin embargo, también es de humanos, desarrollar la capacidad necesaria para rectificar y mejorar.
Estar atentos con la mente en el momento –en lo que pasa– permite pensar diferente y, bien utilizar las oportunidades que aparezcan al frente.